Un largo paseo

abril 13, 2007 • Publicado en Viajes
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La propuesta del día de hoy es caminar por el micro-centro, ir a la Casa Rosada y caminar por San Telmo, pero los planes cambiaron un poco a mitad del día. El micro-centro es la zona de Buenos Aires en donde están los edificios de las altas corporaciones gubernamentales. El Congreso y la Casa de Gobierno -La Casa Rosada- están sobre la Av. de Mayo, el Palacio de Justicia está a dos cuadras de la avenida corrientes y a 4 de la avenida 9 de Julio, en cuyo cruce con la Av. Corrientes queda la Plaza de La República donde está el Obelisco que es el centro de manifestaciones de los Porteños.

Desde la Plaza de la República se puede ir directamente a la Casa de Gobierno por una vía diagonal conocida como la Diagonal Norte. Los tres poderes por lo tanto están en la ciudad formando un triángulo equilátero -vean el mapa para darse cuenta que así es- y el pueblo puede reunirse en la Plaza de La República e ir directamente a manifestarse en la Plaza de Mayo. Se dice que en la zona del Obelisco estaba el edificio donde fue izado por primera vez el pabellón nacional.

La Casa Rosada hasta hace poco era beige, pero están en estos momentos remodelándola y ya es de color rosa. La Plaza de Mayo es la plaza que queda frente a La Casa Rosada, históricamente es el lugar donde se inicia la emancipación de Argentina y como dato interesante hay que decir que en la plaza hay una zona que tiene tierra de todas las provincias de la república y que están tapadas con tierra santa, es una forma romántica de decir que todas las provincias del sur están ahí presentes ante el poder ejecutivo vigilantes de sus acciones.

Una zona de La Plaza de Mayo frente a la casa de gobierno está separada por una cerca, no entendí el por qué hasta que por casualidad vi llegar una manifestación a la plaza, no era una de las grandes que se ven por televisión, era una pequeña, pero paraba el tráfico. Los policías cerraron una parte de la avenida para que el tráfico fuera menor y así darle vía a la manifestación y al tráfico. Resulta que en Buenos Aires las manifestaciones son pan de cada día, todos los días alguien sale a protestar y todos llegan a la Casa Rosada, la policía por lo tanto optó por dejar las vallas ahí de tal manera que la Casa Rosada quedara fuera del alcance de una persona que tirara una piedra y poder ordenar el tráfico rápido sin tener que movilizar todos los integrantes de la policía a menos que fuera necesario.

A unas 7 cuadras de la Plaza de Mayo subiendo por Defensa está San Telmo, una zona típica Porteña, con bares, restaurantes, tanguerías y ventas de antigüedades. Les recomiendo el restaurante ‘El Desnivel’, la carne es excelente, la atención es fenomenal y la decoración es con elementos porteños. El lugar se llama así porque mientras trinchan la carne se siente el desnivel, con respecto a la comida hablaré luego de ello, eso sí, la carne se come acompañada de vino, no con una gaseosa, yo sé por qué se los recomiendo, además el restaurantes es frecuentado por muchos turistas así que ahí podrán conocer gente de todo el mundo. Por cosas el destino ahí cambiaron todos los planes, pensaba volver a mi habitación y estar llegando a eso de las 5 para escribir un rato pero conocí a una alemana con quien salí a caminar pues solo estaría un día más así que necesitaba conocer lo más que pudiera en un solo día. San Telmo es similar a lo que he mencionado de Buenos Aires, aunque el detalle diferente es que la mayoría de las calles son empedradas, en la zona está la escuela de cine de Buenos Aires y varias iglesias que tienen algún atractivo histórico, la verdad el arte religioso para mi no es llamativo, así que pasaba de largo. La zona tiene algunos hostales y es muy agradable para conocer la ciudad si tienen poco tiempo.

Continuando con el recorrido subí con mi acompañante alemana hasta la zona de Puerto Madero para ir hasta el río de la Plata. Puerto Madero es uno de los barrios más nuevos de Buenos Aires y su arquitectura es moderna, pero las primeras construcciones tienen un estilo británico y las actuales me recuerdan a las construcciones contemporáneas que se han hecho a los lados del Támesis -lo digo por las fotos, no porque haya estado en Londres-, es tal vez la zona más costosa por metro cuadrado de Buenos Aires, creo que estaba a U$2300 el metro cuadrado, una exageración, pero hay gente para todo, y ahí estaban el Hilton, otros hoteles 4 y 5 estrellas, las oficinas de Microsoft, de Sun Microsystems, Mapfre y otras empresas. Al terminar Puerto Madero está costanera y se sigue hacia la reserva ecológica principalmente formada por lagos y que es atravesada por un sistema de terraplenes. El destino final es el río de la Plata, ahora entiendo muy bien por qué lo confundieron los españoles con un mar, no se ve costa al otro lado. La zona está infestada de mosquitos y son sanguinarios los condenados, si te quedas quieto unos segundos te atacan hasta 10 a la vez, así que toma la foto y corre por tu vida. La reserva tiene algunas especies de aves y trillones de mosquitos, como reserva no tienen diversidad en fauna o flora, pero la vista del río de la Plata bien vale la pena y la vista de la ciudad moderna -Puerto Madero- es muy agradable. El camino que tomamos se extendía por 4.5 Kms y llevaba hasta cerca del puerto del Buquebus que va hasta Colonia o Montevideo, más adelante están los diques de Puerto Madero y el ‘Divino Buenos Aires’, construcción atípica que parece cubierta por velas triangulares, el complejo tiene 4 diferentes locales incluyendo una disco muy reconocida de la ciudad en donde se hacen las fiestas llamadas ‘after office’ cuya restricción es ir en traje de oficina. Ni modo, no tengo traje de oficina para ir a una de esas fiestas, otro tendrá que contarlas. Este complejo fue construido en donde antes funcionaba un comedor donado por Evita Perón a los trabajadores del puerto.

La zona de los diques de Puerto Madero es una zona turística de bares y cafés, un poco costosos pero muy agradables, en un ambiente muy británico por el estilo arquitectónico, para los que gustan de ver y no tocar en esta zona está el bar Hooters, imagino que entenderán bien cómo es la decoración y la atención. En uno de estos cafés -no en Hooters- nos tomamos una cerveza la alemana y yo mientras hablábamos de turismo y ciudades. Me comenta que hoy en día Colombia es un destino turístico que todo el mundo quiere visitar, el miedo a la violencia de Colombia ya ha desaparecido y actualmente esa sensación se ha desplazado para Caracas, no he escuchado nada al respecto y me sorprende de alguna manera escuchar eso sobre Venezuela, pero ellos son los viajeros. Luego seguimos hasta el Obelisco pasando por los teatros Luna Park, el Maipó, el Ópera y el Gran Rex; nos despedimos intercambiando teléfonos y esperando vernos en el vuelo de regreso pues coinciden hasta Lima, ella por su parte visitaría al siguiente día Recoleta y Palermo para seguir su recorrido por Argentina. Diferentes formas de hacer turismo, el de ella es rápido y sin vivir mucho la ciudad, el mio busca vivir hasta el más mínimo detalle pero eligiendo solo un destino y sin visitar todo Argentina, pero al fin de cuentas todos buscamos lo mismo, vivir la ciudad y conocer este mundo ancho y maravilloso.

Mientras retornaba a mi habitación le dí una mirada a los kioscos de revistas, me había llamado la atención la cantidad de revistas que hay para todos los gustos, incluso de temas insólitos. Encontré revistas para ‘los parrilleros’ (asados a la parrilla), para los motociclistas, para los viajeros, para los fans de los carros, de tunning de carros y partes especiales, incluso revistas de un solo modelo de carro, revistas de aviones, de culinaria, de restaurantes, de manualidades, tejidos, moldes para vestidos, vanidades, hogar, teatro, de temas políticos de izquierda, ninguna de derecha, comics, manga, de historia, de divulgación científica, de ciencia ficción, ocultismo, astrología, perros, gatos y mascotas exóticas, de música, para aprender a tocar instrumentos y por supuesto porno y hentai, todos estos diferentes temas en cantidades increíbles, hasta 4 o 5 de un mismo tópico. ¿Será posible que todo el mundo lea de esa forma acá? Es posible pues por las distancias uno tiene hasta una hora para leer por día, pero con los Walkman y los Mp3 creo que ya no es el caso,

En el subte en promedio encuentres tres personas esuchando en audífonos por vagón, mientras que los lectores puedes verlos solo de vez en cuando, personalmente solo he visto 3 y de esos 2 estaban en un tren y no en el subte.

Las casas en Buenos Aires no tienen espacio para secar la ropa, pero sí hay lavanderías en todas partes, así que por AR$6 puedes llevar una ‘bolsa’ de ropa para lavar, la llevas en la mañana y te la tienen lista en la noche, esos sí, te recomiendo que busques una donde sean personas amables.

Solo por hablar de estigmas étnicos, las lavanderías son de los chinos, los bolivianos y algunas de argentinos. Los mercados son de los chinos mientras que los kioscos de los argentinos, ambos puestos similares en función pero diferentes en nombre.

Y para terminar, hoy pude ver una pelea en la calle entre dos argentinos, de esas peleas de solo insultos y nada de puños, y la verdad no entendí nada, solo una que otra palabra. Algo similar me pasa cuando escucho hablar a dos chicos en la calle, tampoco les entiendo nada, ah y chicos son jóvenes, acá en las filas de las tiendas de comidas nos han dicho a mis acompañantes y a mi ‘chicos’, lo cual me hace gracia porque ya me veo muy viejo como para que me digan ‘chico’, pero es la costumbre.

 
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