Amistades peligrosas
diciembre 12, 2007 • Publicado en Lifestyle• Punto de VistaEtiquetas: amistad
La vida está llena de decisiones, algunas complicadas y otras sencillas, unas muy importantes aunque la mayoría triviales, y así nos pasamos la mayor parte del tiempo tomando decisiones. En ocasiones la vida misma decide por nosotros, las causas y azares nos van enredando de tal forma que pareciera, como si en algún lugar, una mente macabra estuviera haciendo de maestro del juego. Algunos de estos accidentes pueden llegar a ser provechosos, algo así como la suerte de campeón que llaman, otros accidentes traerán problemas y no queda de otra que acabar con ellos de raíz. Pero aveces te encaprichas tanto con esas cosas que aunque sepas no te benefician en nada y tan solo traerán problemas, terminan siendo parte integral e incluso importante de tu vida, hasta el punto de definirte, como por ejemplo los vicios, aveces las drogas y muy seguramente las malas amistades e incluso las peligrosas.
De esos atorrantes nadie se escapa, son los amigos con quienes seguramente preferimos gastar tiempo, además de ser lo único posible por hacer con ellos, se pueden tener charlas interesantes pero la mayoría del tiempo serán totalmente insulsas, se cree que crecemos al lado de ellos pero en realidad nos pegamos en algún lugar que raya en lo infantil, porque con ellos nos atrevemos a sacar eso que no mostraríamos al resto de la humanidad, son nuestro escape a la máscara que llevamos la mayoría del tiempo, son el espacio donde vivimos lo que nos gustaría ser pero nos da pena reconocerlo, son casi como nuestros antiguos amigos imaginarios, solo que ahora son reales y más irresponsables aun, y si fuera verdad el dicho que reza ‘dime con quién andas y te diré quién eres’, entonces deberíamos replantear nuestra amistades urgentemente, pero no lo hacemos porque nos sentimos encantados de poder perder el tiempo con personas tan atorrantes como nosotros, porque ellos también piensan lo mismo de nosotros.
Somos sus amistades peligrosas, somos su válvula de escape a la presión, somos lo peor que les pudo haber pasado y por eso nos entendemos, porque podemos ser tan desgraciados con ellos como lo son con nosotros y nos perdonamos absolutamente todo. Una amistad peligrosa no se basa en la perfección, todo lo contrario, se basa en el caos absoluto, pero se aceptan los errores y aveces se llega incluso al perdón, aunque parezca imposible soportar y perdonar tanta holgazanería.
Dedicado a mis queridos haraganes, Adri, Yanka, Diana, Luza, Moni y Cris. Los amo porque, al igual que yo, son unos desgraciados. Porque ustedes son los que hacen que descubra lo que realmente importa.
Hey juanse!!
Lindo el toallín hahahahaha 😛 hubieras mostrado alguito más ome! juaaas.. nah mentiras.. este pues comentarios mmm.. sólo uno «el que anda entre la miel **** da, algo se le ha de pegar»! hehehehe. Esperaré en qué lista me irás a poner! ojo que no sea el de las ninfómanas, no!!! juaaaaaaaas XD besos desde el caluroso sur.Tqm